Shane es pura sonrisas después de conseguir su
segundo Billabong Ride of the Year, en la entrega de premios Big Wave Awards de WSL que
se realizó este sábado por la noche en Anaheim, California. También fue
nombrado Surfline's Overall Performance, distinción basada en su rendimiento esta
temporada.
Shane Dorian al 100 por ciento. Foto: WSL / Aaron Lynton.
La ex estrella de la gira mundial que se volvió leyenda de
grandes olas ha estado disfrutando de una de las carreras más prolíficas en la
historia de surf profesional. Sin embargo, a raíz de esta histórica temporada Dorian
reflexiona sobre su realidad. "Honestamente, este sería el momento
perfecto para simplemente plantar mi tabla en la arena y alejarme", bromeó
después. "Tirar un Greg Noll y alejarme ... pero no estoy listo todavía.
Sé que llegará, pero todavía realmente quiero disfrutar de correr grandes
olas."
Dicho esto, la carga emocional de esta notable temporada y
la influencia de El Niño no será olvidada por Dorian, que sentía como si
estuviera poniendo su vida en peligro más que nunca. Siendo muy consciente,
además, del hecho que este El Niño puede ser el último que va a ser capaz de
disfrutar en su mejor forma.
"Brock Little habló de lo que le ocurrió - el día en
que todos los surfistas enfrentan las olas grandes", explica. "Él dijo
que estaba remando en Waimea Bay, con olas de aproximadamente 15-18 pies y de
repente no deseó ser parte de esto, y él supo cuando estaba listo... ese día
está llegando para mí... pero no estoy allí todavía, cuando venga yo no voy a
luchar en contra. El Surf ha sido muy bueno para mí. "
Además, en la categoría “Wipeout”, el surfista Nicollo Porcella
fue elegido por la tremenda caída en Teahupo’o, Tahití. El mejor tubo quedó en
manos de Keala Kennelly por lo que hizo en Teahupo’o en Julio del 2015. Y el
Paddle Award fue para Aaron Gold por su fenomenal remada en Jaws, en esta
categoría también estaba nominado el argentino Manuel Resano.
Fuentes:
World Surf
League.
Gravedad
Zero.
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