Luego de 30 años en el mercado, el Snap-T® Pullover sigue
siendo uno de los productos favoritos de los usuarios de Patagonia. Por este
motivo, la compañía decidió celebrar el aniversario de su producto emblema con
una línea de Snap-T rejuvenecida, que combina perfecto con su confección a
partir de poliéster reciclado. Tal como el original, cada pieza es leal a su
esencia y ha sido pensada para que sea funcional, se pueda reparar y acompañe
al usuario por muchos años.
El uso de poliéster reciclado disminuye la dependencia del
petróleo como fuente de materia prima. Frena los desechos, al reducir de este
modo la vida en los basureros y las emisiones tóxicas de los incineradores.
Ayuda a promover nuevas corrientes de reciclaje para prendas de vestir de
poliéster que ya no son utilizables. Y causa menos contaminación del aire, el
agua y el suelo en comparación con el uso de poliéster no reciclado.
Hace treinta años, allá por los ´80, cuando los amantes de
los deportes al aire libre llevaban lana a la montaña para abrigarse y mantener
el calor, Yvon Chouinard (Un escalador experimentado y ambientalista) pensó que
eso no era suficiente. Yvone quería algo que genere calor, pero que sea más
ligero de peso, que se caliente cuando este húmedo y que sea más rápido de
secar.
Así fue como él y su equipo de diseño en Patagonia
comenzaron a trabajar en el primer Snap-T® Pullover. Hicieron algunas pruebas
y, a continuación, comenzaron a trabajar con Malden Mills (ahora Polartec) para
desarrollar el polar Synchilla®, logrando un producto más suave, con excelente
aislamiento y sin retención de agua.
Fue así como, a mediados de los años ´80, Patagonia presentó
el primer Snap-T® Pullover, concebido como una pieza técnica debido a su
resistencia y funcionalidad para hacer deportes al aire libre. Con algunos años
de experiencia en el mercado de la ropa deportiva, y también siendo un defensor
del cuidado del medioambiente, Yvon y su equipo siguieron trabajando para poder
incorporar materiales sustentables.
En 1993, Patagonia adoptó para su línea de productos el
pólar PCR, hecho con botellas plásticas de gaseosa recicladas tras su consumo.
Fue el primer fabricante de indumentaria outdoor en hacerlo. La indumentaria
PCR® fue un paso positivo hacia un sistema más sustentable, que utilice menos
recursos, descarte menos y proteja de mejor manera la salud de las personas.
“Para nosotros, la calidad es más que el aspecto o las
funciones de una prenda: también incluye la manera en que afecta al medio
ambiente y a nuestra calidad de vida. Esto significa trabajar para lograr
materiales y desarrollar procesos que minimicen el daño al medio ambiente”
declara Patagonia.
Hoy en día, Patagonia continúa con el desarrollo y la
inserción de materiales reciclados a sus prendas y son capaces de invertir más
recursos para introducir poliéster reciclado y ofrecer más prendas como las
baselayers Capilene®, las camperas shell, las bermudas para surf y el pólar. Actualmente
también reciclan botellas usadas de gaseosa, desperdicios de fabricación
inutilizables y prendas gastadas (incluidas las propias) para la fabricación de
fibras de poliéster para la producción de muchas de prendas.
Para celebrar el aniversario, y hasta el 16 de mayo, la
compañía invita a todos los usuarios de la marca a la tienda emblema de
Patagonia en Buenos Aires (Suipacha 1178) para participar por un SnapT.
Fuente: Patagonia.
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