Skate trip: Descubriendo Bajada Grande en Paraná

Algunas calles del barrio son ideales para descender rápido y cortar en las curvas. Vecinas y vecinos conviven con los deportistas en las largas sesiones de Downhill skate. Tanto en Bajada Grande como en otros puntos de la ciudad suelen entrenar deportistas que llegan desde la vecina Santa Fe para aprovechar las condiciones naturales de la ciudad.


Foto: UNO / Juan Ignacio Pereira.

Los vecinos de Bajada Grande se fueron acostumbrando a ver como un grupo de muchachos se deslizan con sus tablas por las calles del barrio que comparten con el tránsito habitual. En la bajada de avenida Estrada las jornadas de entrenamientos son extensas y extenuantes. El año pasado, antes de lesionarse, se podía ver por las calles a Franco Rego el campeón argentino amateur que suele divertirse en las bajadas del barrio de pescadores.

Otros de los riders habituales de Bajada Grande son Augusto Ruedas Picciochi que en 2016 se quedó con el título argentino en la categoría Master y ocupó el segundo puesto de la categoría Open. También el campeón nacional fue Santiago González de Neuquén que fue regular durante todo el año y sobresalió entre un grupo de riders que, a nivel país, viene creciendo con pasos firmes.


Foto: UNO / Juan Ignacio Pereira.

Quienes se aventuran en las calles del barrio consiguen en algunas bajadas superar los 60 KM/H por lo que se vuelve fundamental utilizar la mayor cantidad de protecciones posibles (cascos, guantes y rodilleras son una "obligación" necesaria). Las bajadas en skate marcan el ritmo de estos tiempos en donde el interés por los deportes de tablas continúa creciendo. Los habitantes del barrio se cruzan con los visitantes que, muchos de ellos, van camino a una de las vistas más lindas del río Paraná.

Algunas calles son muy angostas con salidas y entradas de automóviles que la vuelven bastante peligrosa. La interacción con los vecinos del barrio es inmediata. Cuando la calle se ensucia con la arena que pierden los camiones, los habitantes del barrio colaboran con las escobas para poder limpiar, "asegurando" el descenso. El riesgo más grande es cuando pasa el colectivo urbano porque la calle se vuelve muy angosta y queda muy poco margen para el error.

Por todo esto Bajada Grande se ha vuelto un destino de gran interés para los riders del litoral argentino. Un interés que seguramente irá creciendo en la comunidad. Junto a este destino se encuentran muchos listos para ser descubiertos.


Fuente:
Uno.


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